Es raro ver al estudio Ufotable salirse de su area, siendo conocidos por traer distintos videojuegos al mundo del anime, como la saga de Tales, Fate y God Eater, pero con Kimetsu no Yaiba, o tambien conocido como Demon Slayer: Kimetsu no Yaiba, Ufotable saca a relucir todo lo que tienen.
La serie, basada en el popular manga Shōnen de Koyoharu Gotouge, traspasa el estilo único de su creador a la animación, con colores y arte que atrae muchísimo a los espectadores.

El primer capitulo nos presenta con el protagonista, Tanjiro, y su hermana Nezuko, ambos dibujados con un peculiar estilo, escenarios con muchos detalles y la trama queda clara en los primeros minutos del capitulo.
El mundo del anime esta plagado de demonios, quienes harán todo lo posible por devorar humanos o reproducirse, algo que les resulta bastante fácil ya que solo deben “contagiar” humanos al infectar su sangre con la propia, y Nezuko, la hermana del protagonista, ha sido convertida.
Para devolver a Nezuko a la normalidad, Tanjiro debe convertirse en un cazador de demonios, y aprender las habilidades únicas que estos poseen para lograr recuperara.

Kimetsu no Yaiba salta directamente al lado emocional, marcando un rápido vinculo con sus personajes, pero es cuando llega el combate que la animación se vuelve rápida, llamativa y fluida.
De la misma manera, el anime también logra enfatizar momentos de humor, los que logran romper un poco la tensión en la vida de los personajes, cuya historia claramente es trágica, en gran parte gracias a la personalidad del Tanjiro.

Nos gustaría contarles mas acerca de la serie que ya ha alcanzado una gran popularidad en estas ultimas semanas, pero preferimos que la vean ustedes mismos ¡Disfruten!